Los coronas dentales y los puentes son algunos tratamientos que forman parte de la rehabilitación oral. Habrá ocasiones en las que sea necesario colocar un puente o una corona para corregir la funcionalidad o la estética de tus dientes.
Anteriormente en otras publicaciones hemos hablado sobre puentes y coronas dentales, sin embargo, me gustaría retomar algunos aspectos importantes. Entre ellos es importante entender la diferencia entre una corona y un puente dental.
Las coronas dentales son prótesis que sustituyen la estructura perdida de un diente, en toda su periferia. Según su material, pueden ser: completamente metálicas, metal-porcelana, libres de metal, silicato de litio y circonio.
Una corona es una cofia con forma de diente que cubre y protege la corona clínica de un diente, ya sea por una fractura, caries o necesidades estéticas.
Un puente dental fijo es un tipo de prótesis dental que se apoya sobre los dientes sanos que el paciente aún conserva en su boca. Normalmente, las prótesis parciales fijas (como también se les denomina) sustituyen a dientes perdidos adyacentes. Son una excelente opción cuando no es posible colocar implantes para sustituir los dientes perdidos usando como pilares de soporte los dientes que existan a los lados de la brecha sin dientes.
Cuando un diente pierde su estructura debido a caries o fractura y se ve debilitado e incapacitado para la masticación, se restaura periféricamente con una corona.
La corona protege al diente de las fuerzas masticatorias y te brinda nuevamente la función y la estética.
El material dependerá de varios factores como la fuerza y configuración de la mordida, el tipo de diente que se restaura y el diente antagonista (con el que choca en la arcada opuesta).
Normalmente cuando se elige una corona como tratamiento es porque el diente ya se encuentra dañado y requiere de una restauración para sobrevivir en boca el mayor tiempo posible.
Una corona bien puesta protege al diente para que la raíz no se vea afectada y pueda seguir funcional durante muchos años más.
No todos los procesos son iguales, puesto que cada caso es distinto, pero normalmente son necesarias de 3 a 4 visitas para colocar una corona.
En la primera se toman unas medidas que se mandan al laboratorio.
En la segunda visita se hace una primera prueba, en la cual se checan puntos de contacto, de oclusión, color, anatomía, etc.
Si es necesario hacer alguna modificación se envía al laboratorio y en la siguiente visita procedemos a la cementación en boca.
Todas estas pruebas son necesarias para que el resultado del trabajo realizado sea un éxito. La estética o el ajuste sobre el diente o el implante deben ser perfectos para que estas coronas sean funcionales en tu boca durante mucho tiempo.
Lo único que vas a sentir cuando te vayan a poner una corona es una ligera presión en el diente.
Una corona dental es una pieza que ha sido diseñada a medida en el laboratorio para que se adapte perfectamente al diente que queremos proteger con la misma.
Las coronas dentales son una buena opción a largo plazo porque son duraderas. Además, este tratamiento tiene una alta tasa de éxito con respecto a otros tratamientos de rehabilitación oral.
Las coronas dentales, también presentan algunas desventajas.
Una de ellas es la necesidad de tallar el diente en la forma correcta para poder colocar la corona, siendo un procedimiento irreversible. Además, se puede experimentar un poco de molestia después del procedimiento, especialmente sensibilidad al calor o al frío.
Las coronas pueden astillarse, especialmente las de porcelana. Si la fractura es grande pueden requerir el reemplazo completo de la corona para que siga cumpliendo su función de estética y mecánica.
Es importante mantener una buena higiene oral y acudir a revisiones regulares con el odontólogo. De esta forma se detecta a tiempo alguna fractura o desajuste de la corona y evitar la formación de caries profundas. En Sakar Dental contamos con garantía de 4 años en nuestros trabajos.
Los riesgos y beneficios de una corona dental deben considerarse para cada caso y paciente, para así poder garantizar que se siga la mejor recomendación y procedimiento. Cada paciente y cada caso es diferente. Nosotros siempre te recomendaremos el mejor tratamiento con el objetivo de preservar tus piezas dentales originales.
Es importante cuidar tu boca y tu higiene dental y la mejor forma de hacerlo es asistiendo cada 6 meses con nosotros para una revisión y limpieza dental.
Hasta la próxima…