De seguro has escuchado sobre las muelas del juicio, esas cuatro piezas dentales que se ubican en los extremos posteriores de la boca, que en ocasiones causan dolor y por eso deben ser extraídas.
La cirugía de muela del juicio es un procedimiento quirúrgico para extraer una o más de estas muelas. Suele ser un proceso temido por los adultos, pero no te preocupes, si estás pensando extraerte estas muelas para tener unos dientes perfectos, te dejamos toda la información necesaria para que te sientas tranquilo.
Si tus muelas o terceros molares presentan las siguientes características, no necesitas operarlas:
No obstante, en ocasiones ocurre que la muela no puede salir completamente y empieza a ocasionar problemas bucales o puede causarlos en un futuro. Algunos de los conflictos más comunes son los siguientes:
No. Se trata de un procedimiento indoloro gracias a la aplicación de anestesia. Dependiendo del grado de complejidad se pueden aplicar tres tipos de anestesia:
La duración de este procedimiento depende de la situación en la que se encuentren tus muelas. En muchos casos se procede de la misma manera que una extracción de cualquier otra muela.
De lo contrario, si es muy difícil de extraer el dentista realizará un pequeño corte en tu encía hasta llegar a la muela, luego cerrará todo, en ocasiones con puntos de sutura.
En la mayoría de los casos la extracción de muelas de juicio tarda unos pocos minutos, llegando a durar hasta unos 20 minutos en caso de ser casos más difíciles.
Luego de haber efectuado la extracción, debes esperar un momento para la recuperación (en caso de anestesia general te trasladan a la sala de recuperación). El dentista o cirujano dental coloca una gasa para controlar el sangrado y ayudar a la formación de un coágulo de sangre, que permitirá que sane la herida.
Después, debes tener en cuenta todas las recomendaciones de tu dentista para que tu recuperación sea mucho más rápida y así evitar inconvenientes.
Lo más común es que en una o dos semanas ya te hayas recuperado por completo de la cirugía.
El principal beneficio es que alivia el dolor, en caso de haberse presentado, lo que te puede proporcionar un bienestar general.
También evita futuros dolores, infecciones y problemas dentales en esa zona.
Además, en muchas ocasiones estas muelas por el poco espacio en la encía hacen que el resto de dientes se muevan, creando una sonrisa poco estética. Al extraer las muelas del juicio antes de que esto suceda permite que el diseño de sonrisa se mantenga en armonía.
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