¿Problemas digestivos? Tal vez empiecen en tu boca

[fa icon="calendar"] 18-nov-2025 13:29:59 / por Dr. Alfredo Sakar

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Cuando hablamos de digestión pensamos en el estómago, el intestino o la dieta. Pocos relacionan la boca con problemas digestivos crónicos. Sin embargo, la boca es el primer eslabón del proceso digestivo: la forma en que masticamos, la presencia o ausencia de dientes funcionales y el equilibrio de la microbiota oral influyen directamente en cómo tu cuerpo procesa los alimentos y en la salud de tu intestino.

En este artículo verás la evidencia, las señales a vigilar y qué puede hacer una clínica dental en Polanco (como Sakar Dental) para ayudarte a mejorar la digestión empezando por la sonrisa.


1) La boca inicia la digestión (y lo hace más de lo que crees)

La digestión comienza en la boca. Masticar descompone los alimentos en partículas más pequeñas, aumenta la superficie que van a atacar las enzimas y facilita la acción mecánica y química que continuará en estómago e intestino. 

Además, la saliva no es solo agua: contiene enzimas (como la lipasa lingual) que inician la digestión de las grasas y factores que ayudan a humedecer y compactar el bolo alimenticio para una deglución segura. Esta fase oral condiciona la eficiencia de la digestión posterior y la absorción de nutrientes. CNBIotec

Pero la masticación también influye en la microbiota intestinal: una trituración deficiente modifica la textura y la disponibilidad de nutrientes, afectando qué bacterias prosperan más adelante en el tracto digestivo, y por extensión la salud intestinal. Estudios recientes destacan que la reducción de la función masticatoria puede alterar el ecosistema intestinal y afectar la salud sistémica. PMC


2) ¿Cómo la mala masticación puede provocar problemas digestivos?

Hay varias vías por las que una boca con función masticatoria deficiente (por pérdida de piezas, prótesis mal adaptadas o dientes muy desgastados) puede traducirse en síntomas digestivos:

  • Alimentos mal triturados → digestión ineficiente: partículas grandes requieren mayor trabajo gástrico y en algunos casos pasan menos digeridas al intestino, lo que favorece gases, distensión y malabsorción parcial de nutrientes.

  • Retraso en el vaciado gástrico y reflujo: comer sin masticar bien puede retrasar el vaciado y aumentar el reflujo gastroesofágico (GERD). Estudios han encontrado asociación entre función masticatoria reducida y mayor prevalencia de ERGE/dificultad para tragar en población adulta y anciana. PubMed

  • Cambio de textura de la dieta → menos fibra y más ultra-procesados: pacientes con dientes ausentes o dolor al masticar tienden a elegir alimentos blandos, frecuentemente menos fibrosos y más procesados, lo que empeora el tránsito intestinal y la microbiota.

  • Compensaciones digestivas: la falta de preparación oral obliga al estómago y al páncreas a “compensar” con mayor trabajo enzimático, y eso puede alterar la eficiencia de absorción, sobrecargar el sistema y favorecer síntomas digestivos crónicos.


3) El eje boca-intestino: la microbiota oral y su efecto sobre el intestino

En los últimos años ha emergido con fuerza la idea del eje oral-intestinal: la microbiota de la boca puede desplazarse (vía saliva o deglución frecuente) y colonizar o modular la microbiota intestinal, alterando su equilibrio y potencialmente contribuyendo a condiciones inflamatorias digestivas.

Estudios en humanos y modelos experimentales han mostrado que la periodontitis y el desequilibrio de la microbiota oral pueden inducir disbiosis intestinal ( desequilibrio en la microbiota intestinal ) y respuestas inflamatorias que no se limitan a la cavidad oral. Esto abre un camino biológico plausible por el que la enfermedad bucal contribuye a trastornos digestivos crónicos. Nature

En términos prácticos: no solo importa qué comas, sino cómo llega ese alimento a tu intestino y qué bacterias acompañan ese tránsito.

https://youtu.be/Ect1ge8XctY?si=1JUtn283fX8mOfKb


4) Evidencia clínica: impactaciones concretas (GERD, dispepsia, malabsorción)

Varios trabajos han asociado la disfunción masticatoria con problemas digestivos concretos:

  • Enfermedad por reflujo gastroesofágico (GERD): estudios observacionales han hallado mayor prevalencia de GERD y disfagia en pacientes con masticación reducida —la ingestión de piezas mal trituradas puede favorecer el reflujo y la sensación de “atasco” al tragar. PubMed

  • Malabsorción y problemas nutricionales: al no fragmentarse correctamente las partículas de grasa, por ejemplo, la acción inicial de la lipasa lingual se reduce, lo que puede contribuir a una digestión lipídica menos eficiente y, en el largo plazo, afectar absorción de vitaminas liposolubles. CNBIotec

  • Disbiosis intestinal relacionada con periodontitis: investigaciones han demostrado diferencias en la composición fecal de personas con periodontitis frente a individuos sanos, lo que sugiere que la inflamación oral puede repercutir en el perfil bacteriano intestinal y modular la inflamación sistémica. Nature


5) Pérdida dental, prótesis mal ajustadas y nutrición: un ciclo que empeora

La ausencia de dientes o prótesis inadecuadas no solo dificulta masticar: condiciona la elección de alimentos y con ello la calidad del aporte nutricional.

 Revisiones y estudios observacionales muestran que la pérdida dental está asociada a peor estado nutricional, especialmente en adultos mayores, con impacto en ingesta de proteínas, fibra y micronutrientes esenciales. 

La consecuencia a medio-largo plazo puede ser fragilidad, peor recuperación ante enfermedades y mayor riesgo de desnutrición. PMC

Por tanto, restaurar la función masticatoria (con implantes, prótesis bien ajustadas o rehabilitación oclusal) no es únicamente una mejora estética: es una intervención con impacto directo en la digestión y la nutrición del paciente.


6) Señales clínicas que deberían encender una alerta en ti (y en tu médico)

Si tienes problemas digestivos recurrentes, presta atención a signos orales que muchas veces pasan desapercibidos:

  • Dificultad para triturar alimentos o sensación de que “se me quedan pegados”.

  • Evitas alimentos duros o crujientes por dolor.

  • Dientes faltantes sin prótesis o prótesis flojas que se mueven al masticar.

  • Encías inflamadas, sangrado frecuente o halitosis persistente (pueden indicar periodontitis).

  • Episodios frecuentes de reflujo, digestión lenta, distensión o gases tras comidas aparentemente normales.

Si coinciden, evaluar la boca como parte del diagnóstico digestivo es una decisión clínica sensata.


7) Qué puede hacer el dentista (y cómo trabaja con otros especialistas)

Una clínica dental en Polanco con enfoque integral (como Sakar Dental) puede ofrecer acciones concretas que mejoran la digestión empezando por la boca:

  • Evaluación funcional masticatoria completa: determinación del número de piezas funcionales, evaluación de la oclusión y pruebas de eficiencia masticatoria.

  • Rehabilitación protésica y protésica sobre implantes: reemplazo de piezas que devuelve capacidad masticatoria real (no solo estética).

  • Ajuste y mantenimiento de prótesis: una dentadura mal ajustada reduce la masticación eficiente; un ajuste correcto mejora la función y la aceptación de alimentos saludables.

  • Tratamiento periodontal: controlar la inflamación reduce la carga bacteriana que puede afectar al intestino.

  • Ortodoncia u otras correcciones oclusales cuando la mordida interfiere en la trituración eficaz.

  • Consejería nutricional básica y derivación: coordinación con nutricionistas y gastroenterólogos cuando la situación lo requiere.

El abordaje ideal suele ser multidisciplinario: odontólogo + nutricionista + gastroenterólogo, especialmente en pacientes con síntomas persistentes o en personas mayores.


8) Recomendaciones prácticas (qué puedes empezar a hacer hoy)

  1. Mastica conscientemente: tarda cada bocado al menos 20–30 veces si es posible (varía por textura). Mejor trituración = mejor digestión.

  2. No evites texturas saludables: si evitas frutas crujientes o verduras por problemas dentales, pide ayuda al dentista: hay soluciones restauradoras.

  3. Hidrátate y evita picar azúcares: la saliva ayuda en la digestión; mantener hidratación mejora su producción.

  4. Checa tu bocanálisis: halitosis, sangrado al cepillarte y sensibilidad son señales para consultar.

  5. Controla tus prótesis: si tienes dentadura removible, contempla su revisión anual y limpieza profesional.

  6. Consulta si tienes reflujo crónico o molestias digestivas inexplicadas: plantea al gastroenterólogo la posibilidad de evaluar masticación y estado dental.

https://vt.tiktok.com/ZSUY9Vqoa/


9) Ejemplo práctico (escenario clínico ilustrativo)

Un paciente mayor con tres muelas posteriores ausentes empezó a evitar verduras crudas y carne, comiendo más purés y alimentos blandos. Con el tiempo presentó distensión postprandial ( sensación de abdomen lleno ) y pérdida de masa muscular. Tras rehabilitación con prótesis fijas sobre implantes y educación nutricional (en una clínica con equipo multidisciplinario), su masticación mejoró, recuperó variedad en la dieta y disminuyeron sus síntomas digestivos. Este tipo de mejoras funcionales suelen traducirse en mejor calidad de vida y menor riesgo nutricional.

https://youtu.be/nxQpP_LsuBg?si=d4RzIEOYWBcKVgDP


10) Cuándo pedir ayuda especializada (odontológica y médica)

Busca atención inmediata en una clínica dental en Polanco si:

  • Tienes dientes faltantes que afectan tu dieta.

  • Sientes dolor al masticar o tragar.

  • Presentas halitosis persistente o encías inflamadas.

  • Has sido derivado por tu médico por problemas digestivos sin causa clara.

Además, si hay pérdida de peso involuntaria, signos de desnutrición o sangre en heces, coordina con tu médico/gastroenterólogo y solicita evaluación dental como parte del equipo.


Conclusión: la sonrisa como un primer paso para una mejor digestión

La salud bucal influye de forma sorprendente y comprobada en la digestión: desde la acción mecánica de triturar alimentos, pasando por enzimas en la saliva, hasta la influencia de la microbiota oral en el intestino. Evaluar y tratar la boca puede mejorar síntomas digestivos, optimizar la absorción de nutrientes y prevenir complicaciones nutricionales, sobre todo en personas mayores.

En Sakar Dental, como clínica dental en Polanco, contamos con experiencia en rehabilitación protésica, tratamiento periodontal y enfoque multidisciplinario para pacientes con quejas digestivas relacionadas con la función oral. Si tienes problemas digestivos persistentes, considera incluir una evaluación dental integral en tu plan de diagnóstico.

👉 Agenda tu cita hoy mismo en Sakar Dental llámanos al 55 7420 5477: evaluamos tu función masticatoria, tratamos patologías bucales y trabajamos con especialistas para mejorar tu digestión desde la primera mordida.



Categoría: Otros tratamientos

Escrito por Dr. Alfredo Sakar